La ortodoncia lingual es discreta

Los brackets linguales se colocan en la cara interna de las piezas dentales y no se ven cuando la persona sonríe, ya que quedan por dentro, en contacto con la lengua. Se trata de un tratamiento muy discreto, porque la superficie exterior de los dientes quedan completamente libres. Este tipo de ortodoncia se adapta a las necesidades de cada paciente y se revisa de manera periódica. La duración del tratamiento dependerá de cada caso, aunque suele durar entre 18 y 24 meses.

Los brackets linguales se fabrican a medida del paciente y aportan la máxima precisión y comodidad. El ortodoncista analizará la estructura dental de cada paciente para desarrollar un plan de tratamiento  individualizado y conseguir los mejores resultados posibles. Esta ortodoncia es idónea para corregir cualquier problema de mordida o maloclusión, y a las pocas semanas de iniciar el tratamiento ya empiezan a ser visibles los resultados. Las personas que pueden elegir los brackets linguales son los adolescentes o adultos que quieren llevar una ortodoncia discreta y estética.

La ortodoncia lingual se recomienda para aquellos que buscan corregir problemas de desalineación, sobremordida, diastemas, mordida abierta, apiñamiento, mordida cruzada, etc. Es apta para personas de diferentes edades, aunque se recomienda que este tratamiento comience después de la erupción de todos los piezas permanentes, alrededor de los 12 años.

El tratamiento con ortodoncia lingual puede durar entre 18 meses y dos años, pero cada 4 semanas se hacen visitas de seguimiento para valorar la evolución del tratamiento y ajustar la tensión de los aparatos. Desde Top Doctors informan que «una vez retirado el tratamiento, la retención es idéntica a la utilizada en el resto de tratamientos, por lo que la estabilidad a largo plazo es la misma».

Además, la ortodoncia lingual facilita la higiene dental durante el tratamiento y no se daña el esmalte de la superficie frontal de los dientes. Incluso, se reduce la posibilidad de que aparezcan manchas en los dientes. Pero durante el tratamiento con ortodoncia lingual, es fundamental seguir una buena higiene dental para evitar la acumulación de placa bacteriana o las caries:

-Es importante cepillarse los dientes después de cada comida durante al menos 2 minutos, insistiendo en la cara interna.

-Usar hilo dental una vez al día, antes de ir a dormir.

-Utilizar un enjuague bucal antibacteriano para complementar la higiene oral.

-Utilizar un cepillo de dientes de cerdas suaves y un cepillo interdental para llegar a todas las zonas difíciles de alcanzar.

¿Qué tipos de brackets linguales hay?

Nos hemos acercado a la clínica Dentalfit y estos profesionales que son expertos en tratamientos de ortodoncia nos han explicado que existen dos tipos principales de brackets linguales:

Los brackets linguales fijos: estos brackets son fijos y requieren la intervención del ortodoncista para su colocación.

Los brackets linguales removibles: el paciente puede retirarlos para realizar  ciertas actividades, como comer o cepillarse los dientes.

Ventajas de la ortodoncia lingual

Las ventajas de los brackets linguales son las siguientes:

Brackets estéticos: los brackets se encuentran colocados en la parte interior de la dentición, pasando desapercibidos y no son visibles al sonreír.

Efectivos: la ortodoncia lingual corrige problemas de alineación, maloclusiones y otros problemas dentales.

Adaptables: los aparatos son adaptables y diseñados para el paciente de forma personalizada.

Cómodos: estos brackets son cómodos y no molestan para comer o hablar.

Requiere menos atención: la ortodoncia lingual no requiere tanta atención por parte del paciente, pero es aconsejable acudir a revisiones y mantener una correcta rutina de limpieza bucodental.

Ideal para deportistas: los deportistas deben apostar por esta ortodoncia para prevenir golpes. Los brackets tradicionales pueden producir heridas, sobre todo si existe algún tipo de golpe.

Fases del tratamiento de ortodoncia lingual

Las fases de este tratamiento suelen dividirse de esta forma:

-Un estudio previo para conocer el estado de los dientes.

-Colocación de los brackets linguales, arcos y gomas.

-Revisiones periódicas cada mes.

-Colocación del aparato de retención.

-Retirada de los brackets linguales.

Cuidados recomendados

Es importante tener en cuenta los siguientes cuidados:

-Usar cera de ortodoncia y tomar analgésicos para el dolor de los primeros días.

-Leer en voz alta para acelerar la adaptación.

-No comer alimentos duros o pegajosos.

-Evitar manipular los brackets.

-Seguir todas las indicaciones del ortodoncista.

-Acudir a todas las citas de seguimiento para garantizar el éxito del tratamiento.

Es necesario adaptar el tratamiento de ortodoncia lingual a cada paciente y seguir las recomendaciones del especialista. Antes de comenzar un tratamiento de ortodoncia lingual, es fundamental someterse a una revisión por parte de un ortodoncista para evaluar el estado de las piezas y proporcionar asesoramiento personalizado. Se recomienda contar con un equipo de profesionales cualificados y buscar un ortodoncista que tenga experiencia en este tratamiento.

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